Hasta hace poco cuando pasaba algo se tardaba mucho tiempo en conocer lo que había ocurrido y, pese a todo, la información terminaba llegando única y exclusivamente a una pequeña porción de gente. Hoy día, en cambio, las noticias llegan a cualquier parte del mundo en menos de un minuto y tienen una repercusión y un alcance masivos. La información se ha convertido en un alimento tan abundante que apenas tenemos tiempo suficiente para poder digerirlo.
Comentar este post